Durante el confinamiento provocado por la pandemia del COVID-19, nos han llegado muchas preguntas sobre pacientes que estaban preocupados porque sus encías han empezado a sangrar, sobre todo, mientras se cepillaban los dientes.
¿A qué se debe el sangrado de encías? ¿Por qué es más probable que lo sufras ahora que antes?
¿Por qué sangran las encías?
Hay muchas personas que piensan que el sangrado de encías es algo normal cuando no lo es. Si las encías sangran, aunque sea solamente al cepillarse los dientes, es un síntoma de que hay algún problema a tratar.
Es cierto que a veces el sangrado puede deberse a cambios hormonales debidos a la menstruación o al embarazo, pero si no es tu caso, quiere decir que las encías están inflamadas y que necesitan más limpieza.
Tener las encías inflamadas y con falta de higiene puede ser síntoma de gingivitis, una de las enfermedades más comunes de las encías. ¿Y sabes qué está muy relacionado con la gingivitis? El estrés.
Durante estos dos últimos meses de confinamiento todos hemos vivido, en mayor o menor medida, más estrés del que soportábamos antes.
El estrés aumenta el cortisol, hormona muy relacionada con la gingivitis y con la periodontitis, la otra enfermedad de las encías que aparece cuando la gingivitis no se trata correctamente y evoluciona a un grado peor.
El estrés, sumado al hecho de tener que estar en casa e ir picando más entre horas sin la higiene correspondiente, ha podido agravar la suciedad y la inflamación de nuestras encías. De ahí el sangrado.
Cómo tratar correctamente el sangrado de encías
Nuestra primera recomendación es el aumento y mejora de la higiene bucal. Es muy importante que si te sangran las encías refuerces la limpieza de tu boca, de lo contrario podría empeorar.
Si se llega a sufrir periodontitis, quiere decir que las bacterias ya han llegado a la raíz de los dientes y podría incluso perderse la pieza dental.
Consejos para reforzar tu higiene dental
>> Asegúrate de que te cepillas los dientes de forma adecuada. Mínimo dos minutos de cepillado y después de cada comida. Haz hincapié en la zona en la que se junta diente y encía. Además, debes limpiar cada diente por delante, por detrás y por arriba en el caso de las muelas.
>> Utiliza hilo dental al menos una vez al día, si es posible, por la noche y antes de lavarte los dientes. Después, cepíllate los dientes con normalidad. Es la mejor solución para eliminar las bacterias que atacan las encías.
>> No cepilles más suave por el sangrado. Aunque te sangren las encías, no reduzcas la intensidad, ya que de este modo podrías provocar el efecto contrario y no limpiar bien tus dientes.
De todas formas, si durante unos días siguiendo estas indicaciones el sangrado no se reduce o si tienes un sangrado fuerte que te ocurre fuera del cepillado, ponte en contacto con nosotros:
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